En efecto, información es
poder. Las situaciones se dominan mejor si sabemos lo que puede ocurrir, conocemos
la reacción del de enfrente o tenemos la capacidad de ofrecer lo que el otro
necesita. Es bueno pues alcanzar ese poder y por tanto dedicar tiempo a tener
información, buscándola y trabajándola.
Pero más importante que tener
ese poder es el cómo lo utilizamos. Desde
el egoísmo o desde la generosidad.
Si es el primer caso vamos a manipular, controlar, utilizar, siempre en beneficio propio.
Las consecuencias son que tendremos a nuestro alrededor personas dependientes, subordinadas, sumisas, e incluso miedosas de nuestro poder. Quienes nos rodean no podrán actuar, no podrán moverse sin nuestro amparo, no participarán, no colaborarán, serán peones a nuestro cargo.
Siendo muy sutiles, conseguiremos que no se den cuenta de su dependencia respecto a nosotros. Pero eso no les hará más válidos, más bien al revés. Nunca nos aportarán nada y la relación que mantendremos con ellos (amigos, colaboradores, etc) será de sumisión total. Vamos que no nos harán crecer porque nos habremos rodeado de incapaces.
Si es el primer caso vamos a manipular, controlar, utilizar, siempre en beneficio propio.
Las consecuencias son que tendremos a nuestro alrededor personas dependientes, subordinadas, sumisas, e incluso miedosas de nuestro poder. Quienes nos rodean no podrán actuar, no podrán moverse sin nuestro amparo, no participarán, no colaborarán, serán peones a nuestro cargo.
Siendo muy sutiles, conseguiremos que no se den cuenta de su dependencia respecto a nosotros. Pero eso no les hará más válidos, más bien al revés. Nunca nos aportarán nada y la relación que mantendremos con ellos (amigos, colaboradores, etc) será de sumisión total. Vamos que no nos harán crecer porque nos habremos rodeado de incapaces.
Actuando con generosidad,
siendo transparentes, enseñando las claves de la situación, podremos rodearnos
de participantes, de responsables, de personas a las que les podemos exigir, de
gente que asume las situaciones y que aporta. Y en su colaboración está nuestro
crecimiento, nuestro nuevo conocimiento, la capacidad de análisis desde varios
puntos de vista, en resumen, la capacidad de mejora permanente.
He tenido jefes y amigos
de todos los colores. De los primeros me quedo con los generosos, de los
segundos, sigo cultivando la amistad de los generosos. A los otros, jefes y
amigos egoístas, los ignoro o los aparto.
En mi opinión y coincido hay mucho de poder egoísta, aunque en el devenir del tiempo es mas reconfortante y enriquecedor el poder generoso
ResponderEliminarEl asunto Benicio es si llegaremos a conocer esos tiempos mejores. Si no los veo creo que me perderé algo interesantes. Una lástima. Yo por lo menos intento aportar mi granito de arena.
ResponderEliminarGracias por acompañarme.